Dormir bien no solo te hace sentir mejor al día siguiente: también se asocia con menos infartos, menos diabetes mellitus, menos demencia… y más años de vida libre de enfermedad (1)
¿El sueño afecta a la esperanza de vida?.
En las últimas décadas se han publicado grandes estudios de cohortes y meta-análisis que muestran una relación clara entre duración del sueño y mortalidad:
- Tanto dormir poco como dormir demasiado se asocia con más riesgo de muerte por todas las causas y por enfermedad cardiovascular (2)
- La relación suele ser en forma de U: el punto “óptimo” se sitúa alrededor de 7 horas de sueño por noche (2)
Además, no es solo cuestión de horas:
- Personas con mal sueño (insomnio, despertares frecuentes, sueño muy irregular) pierden años de vida libres de enfermedad cardiovascular comparadas con quienes duermen bien (3)
- La regularidad del sueño (acostarse y levantarse a horas similares) puede predecir la mortalidad igual o mejor que la propia duración del sueño en algunos análisis (4)
¿Cuántas horas hay que dormir para vivir más?.
Las principales sociedades científicas recomiendan:
- Adultos (18–64 años): 7–9 horas por noche.
- Mayores de 65: 7–8 horas.
- <18 años: 8–10 horas (5).
La curva baja cuando nos acercamos a las 7 horas y vuelve a subir tanto si dormimos muy poco (≤5–6 h) como si dormimos demasiado (≥9 h). Eso es lo que han encontrado múltiples meta-análisis y cohortes en diferentes países (2)
Calidad y regularidad del sueño. Más allá de las horas.
Dormir 7–8 horas no sirve de mucho si ese sueño es una batalla de microdespertares, ronquidos fuertes y vueltas en la cama. La evidencia muestra que los patrones de sueño importan:
- Sueño irregular (cada día una hora distinta de acostarse / levantarse) se asocia con más riesgo de infarto y ictus, incluso con la misma cantidad de horas dormidas (4)
- Trastornos como insomnio o apnea del sueño se relacionan con mayor riesgo de hipertensión, diabetes tipo 2, enfermedad coronaria y peor esperanza de vida (1)
5 Componentes de un “sueño saludable”.
Un sueño saludable se basa en los siguientes 5 requisitos:
- Duración: 7–9 h (adultos).
- Regularidad: horarios similares entre semana y fines de semana.
- Continuidad: pocos despertares, sensación de sueño ininterrumpido.
- Profundidad: sueño reparador, te levantas descansado.
- Calidad subjetiva: tú mismo percibes que duermes bien.eño, salud y longevidad.
Cómo influye el sueño en la salud y la esperanza de vida.
Los mecanismos por los que el sueño influye en la esperanza de vida son múltiples:
- Sistema cardiovascular.
- Dormir poco aumenta la presión arterial nocturna, la inflamación y la rigidez arterial (1)
- El mal sueño se asocia con más eventos coronarios (infarto, angina) y mortalidad cardiovascular.
- Metabolismo y peso.
- La privación crónica de sueño altera hormonas del apetito (leptina y grelina), favoreciendo más hambre y antojos de alimentos calóricos (1)
- Se vincula con mayor riesgo de obesidad, resistencia a la insulina y diabetes tipo 2.
- Cerebro y salud mental.
- Dormir mal se asocia con más depresión, ansiedad y deterioro cognitivo.
- Un sueño adecuado facilita la “limpieza” de metabolitos tóxicos en el cerebro, un proceso importante para prevenir neurodegeneración (1)
- Sistema inmune e inflamación.
- El mal sueño aumenta marcadores inflamatorios sistémicos, que se relacionan con muchas enfermedades crónicas y con el envejecimiento acelerado (1)
5 Estrategias prácticas para optimizar la calidad del sueño.
Pasemos a lo accionable. Todo lo que sigue está respaldado, directa o indirectamente, por la evidencia sobre higiene del sueño y salud a largo plazo (6)
1. Fija una “ventana de sueño” regular.
- Elige una franja en la que puedas dormir al menos 7–8 horas (por ejemplo, 23:30–7:30).
- Intenta mantener la misma hora de levantarte TODOS los días, incluidos fines de semana (variar máximo 1 hora).
- Prioriza la regularidad aunque algún día duermas un poco menos dentro de esa ventana.
2. Optimiza tu entorno de dormitorio.
- Oscuridad: usa cortinas opacas, tapa luces LED.
- Silencio: tapones o ruido blanco si hace falta.
- Temperatura: ligeramente fresca (alrededor de 18–20 °C suele ser cómodo para la mayoría).
- Colchón y almohada cómodos: renueva si tienen muchos años o te levantas dolorido.
3. Hábitos durante el día.
- Luz natural por la mañana (15–30 minutos de sol en la cara, si es posible). Ajusta tu reloj biológico y mejora la secreción nocturna de melatonina.
- Actividad física regular: 150–300 minutos/semana de ejercicio moderado se asocian con mejor sueño y menor riesgo de mortalidad (1)
- Evita cafeína desde unas 6 horas antes de acostarte (algunas personas necesitan incluso más margen).
- Limita el alcohol: puede hacerte dormir antes, pero degrada la calidad del sueño profundo.
4. Rutina de desconexión antes de dormir.
Piensa en una “aterrizaje suave” de 30–60 minutos:
- Baja intensidad de luces y pantallas.
- Cambia a actividades tranquilas: leer en papel, estiramientos suaves, música relajante.
- Prueba técnicas de relajación: respiración lenta (por ejemplo, 4 segundos inhalar, 6–8 exhalar), relajación muscular progresiva o meditación guiada.
5. Manejo del estrés y del “carrusel mental”.
- Si la cabeza se te llena de pensamientos en la cama, prueba el “brain dump”:
- 10 minutos antes de acostarte, escribe en un papel preocupaciones, pendientes y el plan mínimo para mañana.
- Practicar mindfulness o terapia cognitivo-conductual para insomnio (TCC-I) tiene evidencia sólida para mejorar tanto calidad del sueño como salud mental (1)

Cuando todo falla, prueba los suplementos.
Si tras instaurar las pautas anteriores y antes de correr hacia tu médico de cabecera para que te prescriba benzodiacepinas o hipnóticos para dormir tienes la opción de probar suplementos que pueden ayudarte a dormir.
1. Melatonina.
Para qué sirve:
- Jet lag.
- Ajuste de horarios (ritmo circadiano).
- Dificultad para conciliar el sueño.
Cómo funciona:
Es la hormona natural del sueño; ayuda a sincronizar el reloj biológico.
Dosis habitual:
0,5–3 mg 30–60 min antes de dormir.
(“Más” no es mejor; dosis altas pueden ser menos efectivas).
Presentaciones recomendadas:
Soria Natural Melatonina Pura Gotas 1.8 mg – Sueño Melatonina Gotas para Dormir Profundamente, 100% Pura – Melatonina Niños y Adultos – Botella con 50 ml.
Precauciones:
- No recomendable como uso diario a largo plazo sin supervisión.
- Evitar en embarazo, lactancia y en personas con trastornos inmunes sin consultar.
2. Magnesio (citrato o glicinato).
Para qué sirve:
- Reducción del estrés muscular.
- Mejora leve de la calidad del sueño.
- Relajación general.
Cómo funciona:
Participa en neurotransmisores que favorecen la calma (GABA).
Dosis habitual:
200–400 mg por la noche.
Mejor forma:
Glicinato (más suave para el estómago).
Presentaciones recomendadas:
Precauciones:
- El citrato puede causar diarrea.
- Cuidado en personas con problemas renales.
3. L-teanina.
Para qué sirve:
- Ansiedad.
- Rumiar pensamientos por la noche.
- Sueño ligero por estrés.
Cómo funciona:
Aumenta ondas alfa y promueve relajación sin sedación.
Dosis habitual:
100–200 mg 1 hora antes de dormir.
Presentaciones recomendadas:
L–Teanina 500mg – 180 Comprimidos – ¡Bote para 6 MESES! – Para un sueño reparador | Vitamintrend®
Ventajas:
- No produce somnolencia diurna.
- Compatible con la mayoría de suplementos.
4. Glicina.
Para qué sirve:
- Mejora la profundidad del sueño.
- Sensación de descanso por la mañana.
- Buen complemento si te despiertas varias veces por la noche.
Cómo funciona:
Puede bajar ligeramente la temperatura corporal interna, facilitando el sueño profundo.
Dosis habitual:
3 g, 30–60 min antes de dormir.
Presentaciones recomendadas:
GH Glicina | 120 Cápsulas de Suplemento de Glicina – 1000mg de L- Glycine por Porción | Glicine Capsulas de Alta Potencia | Sin OGM, Gluten ni Alérgenos.
Precauciones:
- Muy segura, pero en dosis altas puede causar molestias digestivas.
5. Valeriana.
Para qué sirve:
- Insomnio leve.
- Ansiedad.
- Problemas para conciliar sueño.
Cómo funciona:
Actúa sobre receptores GABA (como las benzodiacepinas, pero más suave).
Dosis habitual:
300–600 mg extracto estandarizado.
Presentaciones recomendadas:
Kneipp Valeriana Classic, Ayuda a Relajar en Caso de Estrés y Favorece el Sueño, 90 Grageas.
Desventaja:
- Efecto impredecible: a algunas personas les activa.
6. Ashwagandha (Withania somnifera).
Para qué sirve:
- Estrés crónico.
- Nerviosismo.
- Sueño afectado por cortisol alto.
Cómo funciona:
Adaptógeno: regula la respuesta al estrés.
Dosis habitual:
300–600 mg extracto KSM-66 o Sensoril.
Presentaciones recomendadas:
Precauciones:
- Evitar si tienes hipertiroidismo (puede aumentar la T3/T4).
7. Pasiflora.
Para qué sirve:
- Ansiedad.
- Despertares por tensión.
- Mejorar relajación profunda.
Cómo funciona:
Agonista suave GABA.
Dosis habitual:
250–400 mg extracto.
Presentaciones recomendadas:
Pasiflora (Passiflora incarnata) hierba con flores Naturalma – 150 g – 300 comprimidos.
Precauciones:
- Puede potenciar sedación si se combina con fármacos ansiolíticos.
8. 5-HTP.
Para qué sirve:
- Personas con bajo ánimo o estrés emocional que afecta al sueño.
- Regulación serotonina → melatonina.
Cómo funciona:
Precursor de serotonina.
Dosis habitual:
50–100 mg en la noche.
Presentaciones recomendadas:
Solgar | Griffonia 5-HTP complex | 30 Comprimidos.
Precauciones importantes:
❗No combinar con antidepresivos ISRS o IRSN (riesgo de síndrome serotoninérgico).
9. Triptófano.
Para qué sirve:
- Mejorar ánimo y sueño.
- Personas que cenan muy poco o toman pocas proteínas.
Cómo funciona:
Aminoácido precursor de serotonina y melatonina.
Dosis habitual:
500–1000 mg antes de dormir.
Presentaciones recomendadas:
Ana María Lajusticia – Triptofano Plus con Ashwagandha y Rhodiola y Magnesio, 60 Comprimidos.
Precauciones:
- Misma advertencia que el 5-HTP, aunque riesgo menor.
Combinaciones útiles (y seguras para la mayoría).
✔ Para dormir rápido.
- Melatonina (0,5 mg) + L-teanina (200 mg).
✔ Para sueño profundo.
- Glicina (3 g) + Magnesio glicinato (200–300 mg).
✔ Para estrés elevado.
- Ashwagandha + L-teanina.
✔ Para despertar menos por la noche.
- Glicina + valeriana.
(Si la valeriana te activa, elimínala.)
🛑 Cuándo NO usar suplementos sin consultar antes a un profesional sanitario.
- Apneas del sueño.
- Insomnio crónico (>3 meses).
- Depresión moderada o grave.
- Embarazo o lactancia.
- Tratamientos psiquiátricos (antidepresivos, ansiolíticos).
- Enfermedad renal o hepática.
En estos casos, los suplementos pueden enmascarar el problema o interactuar con medicamentos.
Situaciones especiales: cuándo buscar ayuda profesional.
Algunas señales de alarma indican que no basta con mejorar hábitos, sino que conviene consultar con un profesional de la salud (médico de familia, neumólogo, neurólogo o unidad del sueño):
- Ronquidos fuertes con pausas de respiración, jadeos o sensación de ahogo (sospecha de apnea del sueño).
- Somnolencia intensa durante el día, cabezadas al volante o en reuniones.
- Insomnio persistente (≥3 noches por semana durante más de 3 meses).
- Comportamientos extraños durante el sueño (agitación, golpes, hablar, caminar dormido) que generan riesgo de lesiones.
La apnea, el insomnio crónico y otros trastornos tienen tratamientos efectivos (CPAP, TCC-I, medicación específica cuando es necesario) que no solo mejoran el descanso sino también la supervivencia a largo plazo al reducir eventos cardiovasculares y complicaciones metabólicas (1)
Cómo mejorar tu sueño en 7 días.
Para cerrar este post, un plan sencillo para empezar a optimizar tu sueño esta semana:
- Día 1.
- Define tu “ventana de sueño” de 7–8 h y pon alarma para irte a la cama.
- Revisa tu dormitorio: ¿luz? ¿ruido? ¿temperatura? Haz al menos una mejora.
- Día 2.
- Paseo de 15–20 minutos a primera hora con algo de luz natural.
- Elimina la cafeína a partir de las 16:00 (o la hora que elijas).
- Día 3.
- Crea una rutina de 30 minutos de “modo noche” sin pantallas.
- Prueba 5–10 minutos de respiración lenta antes de dormir.
- Día 4.
- Incluye 30 minutos de actividad física moderada (caminar rápido, bici, etc.).
- Cena ligera, al menos 2–3 horas antes de acostarte.
- Día 5.
- Haz un “brain dump” nocturno: escribe preocupaciones y tareas de mañana.
- Ajusta alarma para levantarte siempre a la misma hora.
- Día 6.
- Revisa cómo te has sentido esta semana (energía, ánimo, concentración).
- Identifica qué hábito ha tenido más impacto y consolídalo.
- Día 7.
- Mantén la rutina aunque sea fin de semana (sin alterar más de 1 h los horarios).
- Si pese a todo sigues muy cansado, anota tus síntomas para comentarlos a tu médico.
En resumen…
No puedes controlar tu genética, pero sí puedes influir mucho en cómo envejece tu cuerpo a través del sueño.
El sueño cumple importantes funciones fisiológicas insustituibles.
Ajustar tus horas, mejorar tu regularidad y cuidar la calidad del descanso puede darte más años de vida, y sobre todo más años de vida con buena salud.
Dormir es invertir en tu salud actual y futura.
Bibliografía.
- Amin KD, Thakkar A, Budampati T, Matai S, Akkaya E, Shah NP. A good night’s rest: A contemporary review of sleep and cardiovascular health. Am J Prev Cardiol. 2024 Dec 24;21:100924.
- Shen X, Wu Y, Zhang D. Nighttime sleep duration, 24-hour sleep duration and risk of all-cause mortality among adults: a meta-analysis of prospective cohort studies. Sci Rep. 2016 Feb 22;6:21480.
- Huang BH, Del Pozo Cruz B, Teixeira-Pinto A, Cistulli PA, Stamatakis E. Influence of poor sleep on cardiovascular disease-free life expectancy: a multi-resource-based population cohort study. BMC Med. 2023 Mar 2;21(1):75.
- Windred DP, Burns AC, Lane JM, Saxena R, Rutter MK, Cain SW, Phillips AJK. Sleep regularity is a stronger predictor of mortality risk than sleep duration: A prospective cohort study. Sleep. 2024 Jan 11;47(1):zsad253.
- Consensus Conference Panel; Watson NF, Badr MS, Belenky G, Bliwise DL, Buxton OM, Buysse D, Dinges DF, Gangwisch J, Grandner MA, Kushida C, Malhotra RK, Martin JL, Patel SR, Quan SF, Tasali E; Non-Participating Observers; Twery M, Croft JB, Maher E; American Academy of Sleep Medicine Staff; Barrett JA, Thomas SM, Heald JL. Recommended Amount of Sleep for a Healthy Adult: A Joint Consensus Statement of the American Academy of Sleep Medicine and Sleep Research Society. J Clin Sleep Med. 2015 Jun 15;11(6):591-2.
- Preguntas frecuentes sobre el sueño. Sleep education. Disponible en: https://sleepeducation.org/sleep-faqs/. Consultado 12 noviembre de 2025.
Dr. Antonio Alfonso García.
- Médico y Farmacéutico.
- MIR de Medicina Interna.
- Graduado en Nutrición Humana y Dietética.
- Graduado en Ciencia y Tecnología de los Alimentos.
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4 respuestas a «Sueño y longevidad.»
Dormir mal acelera el envejecimiento del cerebro?
Hola Tatiana.
Sí. El sueño insuficiente está relacionado con deterioro cognitivo, acumulación de proteínas como beta-amiloide, problemas de memoria y mayor riesgo de demencia.
Te dejo algunas referencias al respecto:
– Ngo HV et al., Sleep: Slow Wave Activity Predicts Amyloid-β Accumulation. Curr Biol. 2020 Nov 16;30(22):R1371-R1373.
– Moon C et al., Sleep duration, sleep efficiency, and amyloid β among cognitively healthy later-life adults: a systematic review and meta-analysis. BMC Geriatr. 2024 May 8;24(1):408.
– Zhang J et al., Sleep disorders and the risk of cognitive decline or dementia: an updated systematic review and meta-analysis of longitudinal studies. J Neurol. 2025 Oct 13;272(10):689.
– Miao Y et al., Poor sleep health is associated with older brain age: the role of systemic inflammation. EBioMedicine. 2025 Oct;120:105941.
Un post muy clarificador sobre la importania del descanso nocturno. Me recomendaría algún libro sobre descanso, nutrición y estilo de vida para la prevención?. Gracias doctor ❤️
Gracis Verónica. En mi perfil de instagram publicaré en breve videos sobre recomendaciones de lectura sobre Medicina 3.0. Un saludo.